El escenario nunca me lo imagine mejor. Yo, que desde pequeño he seguido todos los sorteos relacionados con grandes eventos futbolísticos (mundiales, eurocopas y Ligas de Campeones) con cuadernito y boli en mano, debuté hoy en la radio de Qué Pasa, La Rebelde, en el sorteo de la cita futbolera de Sudáfrica.
El director del programa, Eloy Tupayachi, con el que comparto muchas horas desde que llegué a Raleigh debido a que se apiadó cuando me vio sólo y sin coche en esta selva yanki, me dijo "Alberto no seas huevón. Habla en el programa como tantas veces me has dado a mí la brasa con el Mundial: que si España es la mejor carajo, que Chile tiene muy buen medio campo con Sánchez o no se quién...dilo en antena".
Sonaba fácil, pero los nervios de la primera vez me nublaban la vista, no estaba cómodo. Hasta que pensé "qué coño", si soy el pesado del fútbol entre mis amigos por qué no voy a demostrarlo aquí.
La ilusión con la que me iba llenando expulsaba poco a poco los nervios de mi mente. Me acordé de las largas charlas en Plaza Mina con Ale, Juampe y Cafú a los que amargaba por ser merengues, mis vicios delante del portátil con Manu con el que conversaba de los más grandes y desconocidos jugadores del planeta o los trivial jugados con el negro durante la infumable clase de Paco Pepe. Por un momento me sentí en casa y creí que todos vosotros estábais ahí.
Tupayachi me dieron la mano y Roberto "El Ché" de Raleigh me dijo: "¿Gallego viste? Todo salió perfecto. Que hinchapelotas que sos!"
Gracias a todos.
